El presidente de la Asociación de Exportadores (Adex), Julio Pérez, proyectó que las agroexportaciones peruanas registrarían un crecimiento de 7.4% en el 2023 en comparación al año pasado, publicó la agencia peruana de noticias Andina.
Expresó su preocupación por la situación de las agroexportaciones, debido a los desastres naturales y confió que las medidas de corto plazo, anunciadas recientemente por el gobierno, minimicen el impacto y se logre exportar los 10.608 millones de dólares proyectados para este año, un avance de 7.4% respecto al 2022.
“Este rubro tiene un gran impacto en la generación de empleos y en la creación de más polos de desarrollo descentralizados, sin embargo, este 2023 tendremos un escenario complejo por las anomalías climatológicas”, enfatizó.
Regiones importantes
Pérez manifestó su solidaridad a las familias peruanas, agricultores, productores y empresarios agroexportadores, quienes afrontan las consecuencias de las lluvias intensas, huaycos e inundaciones que dañaron sus hogares, campos de producción e infraestructura.
El ciclón Yaku y las inundaciones iniciaron en Tumbes y Piura y luego, se extendieron a La Libertad, Lambayeque, Lima e Ica, que son las principales regiones agroexportadoras del Perú y que concentraron en el 2022 el 78% del total de este sector, es decir, casi 7.274 millones de dólares, de alrededor de 9.876 millones de dólares, comentó.
La Libertad, por ejemplo, despachó al exterior por 1.944 millones de dólares, Ica por 1.628 millones de dólares, Piura por 1.283 millones de dólares y Lambayeque por 964 millones de dólares siendo sus principales productos de exportación: uvas, arándanos, mangos, paltas, bananos y espárragos, precisó.
Lima, con campos de cultivos en Barranca, Huaral y otras zonas, lo hizo por 1.833 millones de dólares, e Ica por poco más de 1.628 millones de dólares, cuya oferta constó de cítricos, palta, espárrago, cebollas, fresas, páprika, entre otros, reportó.
“El restablecimiento del tránsito en el puente Sechín en Casma, la semana pasada, ayudó a normalizar la fluidez de la carga del norte peruano. Ya se está cerrando la campaña de arándanos y esperamos que el daño no sea tan grande. Sin embargo, existe una preocupación por las campañas de paltas y uvas”, expresó.
Hectáreas perjudicadas
De acuerdo a datos de los gobiernos locales del norte peruano: Tumbes, Piura y Lambayeque, se estima que hay más de 23.800 hectáreas de cultivos afectados y más de 11.400 hectáreas de cultivos perdidos, sobre todo en algodón, bananos y arroz, comentó.
Frente a esta situación, exhortó al Gobierno no solo a seguir apoyando a los damnificados, sino también a tomar acciones preventivas de urgencia. “No es la primera vez que ocurren estos fenómenos climatológicos y es fundamental estar preparados”, dijo.
“Hay que seguir trabajando de manera conjunta con el sector público. Entidades como el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), Servicio Nacional de Sanidad Agraria del Perú (Senasa) y la Comisión de Promoción del Perú para Exportación y el Turismo (Promperú) cumplen una labor muy importante, pues apoyan el fortalecimiento de las cadenas de valor agroexportadoras, la apertura de mercados y la promoción comercial a nivel mundial”, anotó.