La compañía de transporte fluvial Buquebus anunció la construcción de lo que será el ferry eléctrico, a baterías, más grande del mundo. Aún sin nombre la embarcación tendrá 130 metros de eslora (5 metros más que el buque Silvia Ana) y la desarrolló la firma Incat Tasmania. El nuevo ferry eléctrico se empleará en la ruta que une los puertos de Buenos Aires y Montevideo, separados por una distancia de 270 km, y que actualmente se recorre en 2 horas y 45 minutos.
La embarcación tendrá una capacidad para transportar 2.100 pasajeros y 225 vehículos, con un espacio Duty Free de 2.000 m2 en un solo nivel.
Nuevo sistema de propulsión y cero emisiones
Incat Tasmania prevé entregarlo a Buquebus en el transcurso de 2025, mientras que la firma finlandesa Wärtsilä debería suministrarle al astillero australiano la línea de propulsión y el sistema de carga en muelle de corriente continua a fines de 2024.
“El conjunto de módulos de batería y sistema de almacenamiento de energía es cuatro veces mayor que el de cualquier barco eléctrico/híbrido actualmente en funcionamiento”, asegura Wärtsilä. Es la “solución más eficiente disponible actualmente en el mercado para este rango de velocidades y este tipo de aplicación”, agrega.
La empresa se especializa en la fabricación industrial de generadores eléctricos y motores de barcos, y es la responsable del suministro de toda la cadena para esta innovadora embarcación; incluye también el convertidor de energía así como los propulsores compuestos por ocho motores eléctricos con sus respectivos chorros de agua de flujo axial que lo moverán (en reemplazo de hélices).
“La construcción del buque de Buquebus es puntera en el mundo en cuanto a propulsión y almacenamiento de energía con cero emisiones. Una vez que el buque esté en funcionamiento, sus sistemas de carga en tierra serán los más avanzados y capaces del mundo. Sus capacidades de alta velocidad, largo alcance y cero emisiones son testimonio de su tecnología punta”, asegura Craig Clifford, Director General de Incat Tasmania.
Este astillero se especializa en este tipo de embarcaciones con bajo impacto ambiental y tiene proyectada la construcción de otro ferry más chico y la contratación de 200 empleados en los próximos 12 meses, aunque Clifford va aún más lejos y sostiene que “el personal podría más que duplicarse en los próximos años”.
La flota de Buquebus
La flota actual de la compañía fundada en 1982 por Juan Carlos López Mena cuenta con cuatro embarcaciones en actividad: el Atlantic III, un catamarán de 1992 de 74 metros de eslora y con capacidad para 610 pasajeros y 85 vehículos; el Juan Patricio, botado en 1995 y que supo ser el catamarán más veloz del mundo, con 70 metros de eslora, y capaz de llevar 452 pasajeros y 54 autos; el Silvia Ana, de 1996, con 125 metros de eslora, 1200 pasajeros y una bodega para 220 vehículos; y el Papa Francisco que se estrenó en 2012 con capacidad para 950 pasajeros, 135 vehículos, una eslora de 99 metros y propulsado por dos turbinas a Gas Natural Licuado, con mejor impacto ambiental.
El viejo Eladia Isabel, de 1994, deberá ser removido antes del 10 de octubre, fecha en la que vence el plazo impuesto por la Aduana argentina, debido a que cuando hace un mes se lo quiso poner en funcionamiento para trasladarlo a Uruguay se comprobó que corría riesgo de hundirse.