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El guardacostas GC-24 Mantilla de la Prefectura Naval Argentina y el USCG James de la Guardia Costera estadounidense zarparon hacia altamar para realizar la capacitación, cuyo objetivo principal fue perfeccionar conocimientos e identificar buenas prácticas en materia de control de los espacios marítimos y vigilancia de las tareas de pesca.
El adiestramiento, que contó con la participación de alumnos de las Escuelas Superior y de Cadetes de la Prefectura Naval, incluyó la realización de maniobras de embarco y desembarco de dotaciones de presa, así como movimientos de aproximación y abordaje marítimo. Estas prácticas buscan mejorar la interoperabilidad y la capacidad combinada de ambos países para enfrentar desafíos compartidos en el ámbito naval.
La visita a la República Argentina, tras una escala en Montevideo, se produce en un contexto regional de creciente preocupación por la presencia de la flota pesquera china y sus prácticas en aguas del Atlántico Sur y se enmarca en un momento significativo en la continua colaboración entre ambos países, orientada a mejorar la seguridad marítima y combatir actividades ilícitas en el mar. El buque y su tripulación arribaron al puerto de Buenos Aires el 29 de abril de 2024.
Acerca del Cutter James
Con base en Portsmouth, Virginia, y operando bajo el comando del Área Atlántica de la Guardia Costera de Estados Unidos, el Guardacostas Cutter James participa en una variedad de operaciones desde contra narcóticos hasta el cumplimiento de la ley marítima.
Es un buque de seguridad nacional clase Legend con puerto base en North Charleston, Carolina del Sur. Su diseño proporciona un mejor comportamiento en el mar, mayores velocidades de tránsito sostenidas, mayor resistencia y alcance, y la capacidad de botar y recuperar de popa embarcaciones pequeñas, así como también proporciona instalaciones de apoyo a la aviación y una cubierta para helicópteros y vehículos aéreos no tripulados.
Con una dotación de 150 hombres y mujeres, el USCG Cutter James, es uno de los barcos más grandes y tecnológicamente avanzados de la flota de la Guardia Costera de Estados Unidos.
La tripulación está dedicada a misiones que incluyen el combate al tráfico de drogas y la vigilancia de actividades de pesca ilegal, no reportada y no regulada en el Atlántico.
Su trabajo no solo apoya las necesidades de Estados Unidos, sino que también contribuye a la estabilidad y seguridad regional.
Dimensiones y capacidad operativa
Con una eslora de 127 metros, el Cutter James no solo impresiona por sus dimensiones, sino también por su capacidad operativa.
Capaz de alcanzar velocidades superiores a 28 nudos (51 km/h) y con un alcance de 12.000 millas náuticas, este buque está equipado para misiones de larga duración, con una autonomía de hasta 60 días en el mar.
Para llevar a cabo las misiones contra el narcotráfico y la vigilancia del mar, este buque cuenta con un arsenal que incluye un cañón MK 110 de 57 mm y un sistema de control de tiro.
Además, posee un sistema de armas de proximidad Phalanx Close-In de 20 mm, cuatro ametralladoras de calibre 50, dos ametralladoras M240B de 7.62 mm, y cuenta con protección balística para su cañón principal.
Además, está equipado con una amplia pista de aterrizaje, lo que permite la operación de aeronaves en misiones de vigilancia y rescate, ampliando significativamente su capacidad operativa en el mar.
