La visita del presidente Lacalle Pou se desarrollará entre los días 18 y 25 de noviembre. El objetivo de la instancia es fortalecer las relaciones económicas y diplomáticas con el principal socio comercial del país. Por este motivo, la vicepresidenta, Beatriz Argimón, asumió la presidencia de Uruguay.
El cambio de mando se ejecutó en la base aérea n.° 1 Gral. Cesáreo Berisso durante la mañana del sábado 18. De esta instancia también participó el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado.
La delegación oficial también está integrada por el ministro de Relaciones Exteriores, Omar Paganini; la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche; la ministra de Industria, Energía y Minería, Elisa Facio, y el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos.
También concurrirán el director ejecutivo de Uruguay XXI, Sebastián Risso; representantes del Instituto Nacional de Vitivinicultura, del Laboratorio Tecnológico del Uruguay y del Instituto Nacional de Carnes.
Asimismo, participarán representantes de cámaras y asociaciones empresariales de áreas relevantes en el vínculo económico-comercial entre ambos países.
El objetivo de la visita de Estado de Luis Lacalle Pou es fortalecer las relaciones económicas y diplomáticas con el principal socio comercial del Uruguay, así como profundizar la asociación estratégica entre ambos países. La misión oficial contempla, además, un componente académico, al incluir una visita a la reconocida Universidad de Tsinghua.
Balanza comercial y objetivos
El 2022, el segundo año de la administración de Luis Lacalle Pou, fue un año de exportaciones récord para Uruguay, y en las cifras globales China tuvo un rol fundamental: como el principal socio comercial, representó el 28% de las exportaciones de bienes, con 3.675 millones de dólares exportados sobre el total de 13.356 millones de dólares, según el informe anual de Uruguay XXI.
Esto, a su vez, significó un aumento anual del 12% en las colocaciones al país asiático durante el 2022.
Asimismo, la carne bovina fue el principal producto colocado por el país en el mercado internacional —un 20% de los exportado, por valores de 2.557 millones de dólares. Dentro de esta cifra global, China volvió a ocupar el primer puesto con una participación del 58% —1.475 millones de dólares. Del total de colocaciones en el mercado chino, las de carne representaron, a su vez, el 40%.
En cuanto a las importaciones, por su parte, el país liderado por Xi Jinping fue el segundo origen de los bienes que ingresaron a territorio nacional: el 21% de lo importado provino de este país, unos 2.352 millones de dólares.
Con estas cifras al cierre del 2022 y una balanza comercial positiva para Uruguay, el gobierno avanzaba por lo que parecía ser el camino rápido en la negociación de un Tratado de Libre Comercio (TLC) bilateral. Sin embargo, el panorama cambió significativamente en el 2023.
¿Cuál es la realidad de la balanza comercial hoy?
Uruguay lleva exportados 1.334 millones de dólares a China, en lo que va del año.
Lejos de haber quedado relegada en términos de importancia, la relación comercial con China varió visiblemente del año pasado a este. Más allá de que el TLC impulsado por Luis Lacalle Pou quedó prácticamente paralizado por decisiones más bien políticas desde el gobierno de una de las principales potencias mundiales —en función de priorizar un acuerdo en bloque con el Mercosur—; las condiciones económicas del país asiático influyeron en gran medida en la balanza entre ambos países y en la caída general de las colocaciones uruguayas.
El principal inconveniente fue la reducción de la demanda china ante la situación local de estancamiento de la economía —producto de los efectos tardíos de la pandemia de Covid-19—, que se reflejó mayormente en la caída de las exportaciones de carne y de productos lácteos.
Sin embargo, la sequía en el plano local —que redujo significativamente las exportaciones de soja— y la caída de los precios de carne en el plano internacional también incidieron en el desajuste en relación con el 2022.
Caída de las exportaciones
De esta forma, en un año que lleva ocho meses de caída general de exportaciones y nueve de retroceso en las colocaciones de carne bovina, el deterioro en los intercambios con China explican en mayor parte los resultados negativos: ya desde enero quedó relegado al segundo lugar como destino de exportaciones uruguayas —con la excepción de marzo y mayo, cuando estuvo primero—; mientras que el país colocó menos bienes de enero a setiembre y menos carne en todos los meses de este año, hasta el momento.
Según los informes mensuales de Uruguay XXI, el retroceso en las colocaciones con China tuvieron la siguiente dinámica: en enero cayeron un 50% en general y un 55% en carne; en febrero, la caída fue del 38% y el 36%, respectivamente; en marzo, del 25% y el 34%; en abril, del 53% y el 50%.
Asimismo, en mayo también se registraron retrocesos del 32% en colocaciones de bienes y del 37% en colocaciones de carne, en términos interanuales; en junio, las caídas fueron del 53% y el 50%; en julio, del 57% y el 35%; en agosto, del 45% y del 21%; y en setiembre, del 24% y el 31%.
Octubre, por su parte, mostró una recuperación del 3% en las exportaciones de bienes hacia China, si bien las colocaciones de carne volvieron a bajar, confirmando una vez más la tendencia que viene desde el año pasado en relación con este producto y ya lleva 15 meses.
Carne: 15 meses a la baja
Las exportaciones de carne uruguaya a China llevan 15 meses consecutivos a la baja.
Mientras tanto, la situación económica china genera dudas sobre si esta situación podrá revertirse en el corto plazo, en tanto el plan del país asiático es estimular la producción y el consumo interno —lo que puede generar mayores restricciones a exportaciones e importaciones y, además, un focalización de los recursos estatales a medidas de apoyo para los ciudadanos, que lleve al consumo del stock disponible antes que a la realización de nuevas compras significativas a Uruguay.
Sobre esto, además, se suma el deterioro también en las colocaciones de productos lácteos —que ya se observó también en el 2022. Y también hay que considerar que las exportaciones de soja a China durante el año estuvieron lejos de ser ideales, con una caída del 87% en abril y sin colocación alguna en julio y agosto.
Es así que Lacalle Pou no llegará a China con cifras alentadoras, y apenas 1.334 millones de dólares exportados, a falta de dos meses para que termine el año y 2.341 millones de dólares por detrás del récord alcanzado el año pasado. En este sentido, el presidente tendrá mucho que negociar con su par chino durante los seis días que dure la misión oficial.